Con la presencia de 914 delegados acreditados, pertenecientes a 86 sindicatos de todo el país, sesionó este sábado la Conferencia Sindical del Partido Obrero. La conferencia fue presidida por una mesa de dirigentes clasistas, donde se destacaron, entre otros, delegados del Subte y de Kraft. En su informe de apertura, Néstor Pitrola señaló: "La convocatoria del gobierno y de Moyano a un acto contra el sindicalismo clasista -y la casi inmediata decisión posterior de levantarlo- son un retrato de la crisis del gobierno kirchnerista. Esa crisis es resultado de su impotencia para enfrentar la crisis capitalista, que los trabajadores pagamos con despidos, congelamiento salarial y tarifazos". Pitrola añadió que "trabajamos para que la clase obrera juegue un papel independiente en esta crisis y pueda ser la cabeza de una salida en favor de todos los explotados". A partir de ese planteo político, la Conferencia resolvió apoyar la continuidad del plan de lucha del subte, la movilización por los despedidos de Kraft, la lucha de la salud en Tucumán y de los docentes en todas las provincias.
Finalmente, la Conferencia votó impulsar "una marcha masiva el próximo 20 de diciembre, con los obreros del subte y de Kraft a la cabeza, junto a toda la clase obrera, al movimiento piquetero y estudiantil, por trabajo, por salario y por una nueva dirección en los sindicatos".
Finalmente, la Conferencia votó impulsar "una marcha masiva el próximo 20 de diciembre, con los obreros del subte y de Kraft a la cabeza, junto a toda la clase obrera, al movimiento piquetero y estudiantil, por trabajo, por salario y por una nueva dirección en los sindicatos".